
Dentro del objetivo de recuperar fuentes y lavaderos como espacios de interés etnográfico y que en su día jugaron un papel como destacados puntos de encuentro de la gente, y también respondiendo a una demanda vecinal, el Ayuntamiento de Avilés abordará la recuperación del lavadero de Valparaíso cuya construcción se remonta al año 1927, por lo que está a punto de cumplir nada menos que un siglo.
Para frenar el deterioro en los muros de piedra perimetrales de cierre se abordarán unas obras de mantenimiento y conservación del lavadero, para lo cual el Ayuntamiento ha adjudicado un contrato menor a la empresa Mevals por importe de 11.458,70 €. Se retirará todo el material que está suelto, tanto en muros laterales, y cubierta y se limpiará toda la vegetación del interior, para posterior aplicación de herbicida, y remate de cargas con pasta de color arena en el relleno de las zonas con pérdida de cargas y en las zonas a reponer éstas.
Se realizará el picado de las cargas en los paramentos verticales y la posterior aplicación de mortero hidrófugo, acabado en color arena.
Se ejecutará en el perímetro una acera con un ancho de
El mismo mortero hidrófugo levemente armado con fibra de vidrio se utilizará para rematar la parte superior de los muros tras consolidar las piedras superiores y la eliminación de las partes irrecuperables dejando la parte superior estable y con garantías de estabilidad.
El objetivo de la actuación es la puesta en valor y actualización del aspecto de un elemento de gran valor etnográfico de uso doméstico y funcional, un lavadero que servía para la recogida de agua potable para las casas de la zona, abrevadero de los animales, además de contar con espacios destinados al lavado de ropa. Todo ello vinculado a fuentes o manantiales subterráneos y naturales que brotaban en la proximidad y que en su época funcionaba como centro de reunión y actividad laboral doméstica.
Según explicó el concejal de Obras y Medio Ambiente, Pelayo García, se trata de "una conservación y mantenimiento de todos aquellos elementos que se mantienen. Que se distingan perfectamente los vasos, la zona donde se produce la incorporación del agua. No se trata de reconstruir el lavadero a su situación inicial, sino de mantener y conservar todos aquellos elementos que distinguen este lavadero y, al mismo tiempo, mejorar el entorno en el que se encuentra".
El de Valparaíso fue el primer manantial de agua potable que hubo en la ciudad, un enclave trascendente en la historia de Avilés, cuyo origen se remonta a finales del siglo XVI con la traída de aguas desde Valparaíso a la ciudad. La histórica traída de aguas dio agua potable a la Villa y originó otras fuentes, algunas monumentales como la de La Cámara, Caños de San Nicolás (calle La Ferrería) y la de los Caños de San Francisco actualmente en restauración.
El acondicionamiento del lavadero de Valparaíso se suma a la ya abordada en El Caliero donde se invirtieron unos 48.000 euros en su reconstrucción.
- Mantenimiento y Via Publica